Estar en la dependencia. Este es el concepto clave en las sociedades actuales. También en el liberalismo, pero aún más en el antiliberalismo. De ahí que la gente venda su voto por comida o combustible o simplemente por las palabras mentirosas de un político sonriente, trajeado y guapo que te promete temerariamente cualquier cosa si le votas. Es seguro decir que éste es el fracaso total de la democracia y que lo que funciona mal, o incluso muy mal, debe ser sustituido por algo que funcione bien.
Sobre mantener a la gente en la dependencia